Asturias - Chicago - Washington - Miami - ?
Aunque el tiempo no acompaña demasiado por Asturias, las vacaciones preUSA me están viniendo de perillas. Además, ya he cerrado los billetes de avión y tengo buenas perspectivas en la búsqueda de alojamiento. Solucionados un par más de asuntos, de aquí al 7 de septiembre podré veranear de verdad. Mientras, escribo desde la oficina del Palacio de Meres, que está muy guapo.
Por aquí seguimos de recogida. Llevo horas en el departamento de la Facultad limpiando varios ordenadores. 'Deleteando' lo que no me vale y agrupando el resto para meterlo en un par de cedés, que es increíble lo que cabe ahí si no tienes que guardar audio o vídeo. Lo más complicado ha sido encontrar los archivos donde se guardan el inbox, sent, address books, etc. del correo electrónico; y eliminar archivos duplicados, versiones viejas de textos, documentos que aparecen en diferentes carpetas y no sabes si son el mismo o no... Total, que estoy en plena mudanza electrónica.
Sigo sin alojamiento para cuando llegue a Chicago y sin dejar de escaparme un fin de semana. Este último volví a Asturias, pero esta vez parando -a la ida y a la vuelta- en Santander. A eso se le llama alargar el fin de semana, que acabó el lunes por la noche en Cañadío y alrededores, comprobando in situ que lo de la pijería en la capital cántabra no es ninguna leyenda. Aún así, encontré una ciudad del norte de España con ambiente un lunes, algo insólito, y a gente muy divertida. Y una catedral curiosa, distinta, donde lo más bonito es la capilla que está debajo de la nave principal.
