Sin Niño

Aquí estoy, apenado desde la distancia por la marcha de Torres. Tenía que pasar, pero igual da rabia. Con el equipazo que tiene ahora el Atlético, con todos sanos, se podría dar mucha guerra. Una pena. No sólo porque se pierde un muy buen jugador, sino sobre todo por lo que representa en el club y porque quedan muy pocos futbolistas leales a sus colores por encima de todo. Espero que por fin explote del todo en el Liverpool.

Sufre mamón bis

Ten amigos para que hagan un vídeo como éste y lo cuelguen en YouTube... Que conste que he cantado exactamente cinco canciones en mi vida en un karaoke. Léase: "Vaya, vaya, aquí no hay playa", en Pamplona, en 1999; "Bandido", de Bosé,; "Twist and shout", y "Sufre mamón", dos veces. Las tres últimas en Miami Beach este año.

(He quitado el video ya por fin)

Nueva Orleáns bis

Llevo cuatro días en Nueva Orleáns y esta tarde me vuelvo a Miami. Ha pasado casi un año desde que visité esta ciudad por primera vez y casi dos desde el paso de Katrina.

El centro de Nueva Orleáns ha revivido. Se ve más tráfico, turistas, oficinas y comercios abiertos y casi todos los daños han sido reparados. Los restaurantes vuelven a funcionar y se puede disfrutar seguramente de la mejor gastronomía de Estados Unidos. Vuelve a parecer una ciudad. Y el carnaval de Mardi Gras de febrero atrajo a más turistas que en años preKatrina.

Ahora bien, te alejas del centro hacia los barrios residenciales y el panorama sigue siendo bastante desolador. Aún hay calles y calles y calles con las casas sin tocar. Se han retirado bastante escobros, pero hay zonas donde cuesta creer que la gente vaya a volver a vivir.

Se calcula que, aunque siga volviendo gente a buen ritmo como hasta ahora, no se pasará de 400 mil habitantes. Antes del huracán eran unos 650 mil. Así que, en cualquier caso, la ciudad habrá perdido un cuarto de millón de personas.

Vuelta del palizón

Acabo de volver del viaje cruzando en cuatro días todo el país. Tremenda paliza, pero también una gran experiencia, personal y profesional. Además de hacer un montón de fotos todos los días mantuve un blog en Univision.com que parece que ha conectado con la gente. Así que más no se puede pedir.

Santa Mónica

Debe de ser verdad que hay mucha estrella en Los Ángeles, porque en dos horas de paseo de Santa Mónica me he chocado -con el primero, literalmente, en la tienda de puma- con Djimon Hounsou y con Michael Cooper. Que hombre, no son Denzel Washington y Magic Johnson, pero tienen su encanto. Y sobre todo, iban muy tranquilos un sábado por la tarde, uno de compras y otro a la playa arrastrando los juguetes del crío.

Pese a darme una pateada de 17 kilómetros es tarde, que se dice pronto, no he visto más que Santa Mónica, Venice Beach y Marina del Rey. Pero si tuviera que mudarme a Los Ángeles, ya sabría dónde vivir. Un apartamentito en Venice Beach cerca de la playa.

California

Acabo de aterrizar en Los Ángeles y estoy alucinado con la locura de final de liga escuchando la Ser en el pórtatil, desde la habitación del hotel. En cuanto acaben los partidos, que va a ser ya, me voy a Santa Mónica a dar un paseo.

Cinco mil kilómetros

Pasado mañana vuelo a Los Ángeles. El domingo saldré de allí, en caravana por carretera, con un grupo de gente que cruza el país para llevar cartas a Washington en favor de la reforma migratoria.

Los Ángeles - Albuquerque - Dallas - Chicago - Washington, D.C. Cinco mil kilómetros, clavados. Bueno, según Mapquest son 4.997,55 kms. En cuatro etapas. Palizón.

Lo contaré todo en este blog: Diario de viaje de la caranava de Piolín. Es decir, me pagan por esto.